Convivencia Vocacional Valle 2013

Este fin de semana se ha celebrado en nuestra casa cuna de M. Petra en el Valle de Abdalajís la convivencia vocacional anual. Os dejamos con algunas imágenes del encuentro. En unos días, los primeros testimonios.

EL RESUCITADO SALE A TU ENCUENTRO

"El resucitado sale a tu encuentro” Cita Central: Lc 24,13-35

Hoy, déjate acompañar en lo que vives, déjate acompañar por su Palabra, déjate alimentar por su eucaristía, estos tres aspectos son lugares de encuentro con el resucitado. El camino de la vida, las Escrituras y la Fracción del pan, (la eucaristía)
Volvemos a ver al incansable Jesús, al buen Pastor que sale al encuentro de dos de sus discípulos. Dos discípulos desilusionados de Jesús, descorazonados del fracaso tan estruendoso de aquel que tenían por maestro y huyen de Jerusalén. Sin darse cuenta, por falta d efe, huyen de la experiencia del amor más grande, huyen de la experiencia del amor del Maestro que ha dado la vida por ellos. Huyen a Emaús, no entienden y se evaden, creo que cada uno de nosotros tenemos nuestros Emaús, lugares donde nos evadimos, ¿De qué huyo en mi vida? Mi realidad desde la que muchas veces huyo, huyo sin darme cuenta de la experiencia profunda donde Dios me ama. ¿QUÉ SIGNIFICA EMAÚS? Lugar donde me evado para no percibir la realidad, cuando no me encuentro con Cristo, ahí donde voy. Esos lugares son: relaciones insanas, codependencias, activismos, enganches afectivos…
Me voy a Emaús cuando no encuentro al Señor, cuando no hago experiencia de amor en mi interioridad, además, en el irte a Emaús te estás perdiendo el reconocer a Jesús en tu vida. Y, además, como los discípulos vamos tristes. El motivo de no encontrarse con el Señor de parte de los de Emaús y de no reconocerle cuando se les acerca es que se habían hecho una idea de cómo Jesús tenía que salvarles, es decir, una falsa imagen de Jesús. Jesús no fue salador como ellos pensaban que debía serlo, y por eso van tristes y abatidos por que Jesús o la falsa imagen de Jesús les ha defraudado. ¿Qué falsas imágenes tienes de Jesús? ¿Eres capaz de reconocer a Jesús resucitado en los acontecimientos que van sucediendo en el camino de tu vida? Deja que hoy el maestro te explique desde las escrituras tu historia de salvación. Jesús, a través de las escrituras demuestra a los discípulos de Emaús que a Dios no se le escapa la historia de las manos, deja que el maestro se ponga a tu lado y te Pregunte: ¿cómo estás? ¿Qué te pasa? ¿Me siento acompañado/a en mi camino?
El fruto del diálogo con Jesús ha de ser el de los discípulos de Emaús: “quédate con nosotros porque atardece y el día ya ha declinado” pídele que se quede contigo, el fruto de escuchar su Palabra es querer tener esa experiencia de cercanía del resucitado siempre.
Después, los discípulos reconocen al resucitado al partir el pan. En el don de la Eucaristía tenemos la oportunidad de encontrarnos con el resucitado, él está vivo, resucitado, palpable, cercano en la eucaristía. Es impresionante la iniciativa del Señor, para que le reconozcamos resucitado se hace Eucaristía; es decir, que como los primeros discípulos, nosotros también podemos tener un encuentro vivo con el resucitado en la eucaristía.
Deja que hoy arda tu corazón como el de los de Emaús, y sobre todo, reconocer que el resucitado nos alimenta y capacita para ser sus testigos. El Fruto que provocó el encuentro de los de Emaús fue ese, después de lo sucedido, volvieron a Jerusalén, ya no tenían miedo. ¿No ardía...? se da una experiencia más interior que la que tenían, no es externa, es interna, Y MÁS FUERTE vuelven a Jerusalén, van allí a afrontar aquello de lo que huían, fruto del encuentro y la capacitación de Jesús sobre sus vidas.